Un quiste ovárico es un tumor benigno que crece en los ovarios. El ovario produce folículos que liberan óvulos durante el ciclo menstrual. Sin embargo, en algunos casos, un quiste puede permanecer en su lugar y provocar la ruptura del quiste. Esto puede ser doloroso y restringir el flujo de sangre a los ovarios. Si el quiste ovárico es grande y duro, puede romperse y provocar dolor intenso y hemorragia interna.
Si un quiste ovárico no causa ningún problema, es posible que pueda controlarlo sin tratamiento. Su médico puede recomendarle una ecografía cada tres meses para verificar el tamaño del quiste y determinar si necesita tratamiento. Los quistes funcionales a menudo desaparecen por sí solos, por lo que es mejor controlarlos de cerca. Una próxima ecografía ayudará a su médico a determinar si existe una afección subyacente. Si sus síntomas son demasiado extremos para atribuirse a un quiste, es posible que necesite cirugía.
Otro síntoma de un quiste ovárico es el dolor al orinar. Puede notar una sensación de plenitud o presión al orinar. Algunas mujeres también experimentan retención urinaria. Un quiste en los ovarios también puede causar fiebre y vómitos. Si sospecha que tiene un quiste de ovario, debe visitar a su médico para un diagnóstico adecuado. El médico realizará un examen pélvico para descartar cualquier afección subyacente. Si los síntomas son graves, su médico realizará una ecografía vaginal para confirmar la presencia de quistes.
Algunas mujeres no tienen síntomas asociados con un quiste ovárico. El síntoma más común es una sensación de presión o dolor en la parte inferior del abdomen. Esto puede ser agudo o sordo, y puede durar semanas. Si el dolor es persistente o empeora, debe consultar a un médico para asegurarse de que no tiene una enfermedad subyacente grave. Su médico realizará pruebas para verificar si hay causas subyacentes y tratar la afección.
Un obstetra/ginecólogo o una enfermera partera certificada podrá diagnosticar un quiste ovárico. Hablarán sobre su historial médico y le harán un examen pélvico para asegurarse de que no haya sangrado. Si tiene síntomas de quiste ovárico, no debe retrasar la búsqueda de un diagnóstico. Muchos quistes desaparecerán por sí solos sin tratamiento y no son peligrosos. Si tiene alguno de los síntomas mencionados anteriormente, visite a un médico de inmediato.
El dolor de los quistes ováricos es un síntoma común, pero es posible que algunas mujeres no sientan ningún dolor. Ocasionalmente, los quistes pueden romperse y causar dolor intenso. El peso del quiste puede hacer que el ovario se tuerza y cause un dolor agudo. Una mujer que sufre de un quiste ovárico debe buscar atención médica si experimenta estos síntomas. También pueden provocar sangrado anormal en el área pélvica y el útero.
Hay varios síntomas de los quistes ováricos. El dolor y la incomodidad en la parte inferior del abdomen pueden ser causados por un quiste folicular. Un quiste folicular ocurre cuando un óvulo no se libera y sigue creciendo dentro de los ovarios. Un quiste del cuerpo lúteo ocurre cuando el saco que rodea al óvulo no se disuelve. Otros síntomas pueden ser causados por la endometriosis. Su médico debe realizar un examen físico para descartar cualquier otra causa del dolor.
Un examen pélvico detectará un quiste. Si el dolor es intenso, su médico le sugerirá una ecografía o una tomografía computarizada. Una ecografía también puede mostrar si tiene un quiste. El médico realizará un examen pélvico para detectar síntomas. Si el dolor es intenso, deberá someterse a una cirugía para extirpar el quiste. Si los síntomas son demasiado frecuentes, debe consultar a un médico. La mayoría de las mujeres no tendrán efectos secundarios notables.
Los síntomas de un quiste ovárico incluyen dolor al orinar y vaciado de la vejiga. Pueden afectar el intestino y la vejiga, y pueden provocar sangrado. Si experimenta estos síntomas, debe consultar a su médico inmediatamente. Si los síntomas persisten, es posible que necesite un tratamiento quirúrgico para extirpar el quiste. Si el síntoma persiste, una tomografía computarizada puede ser la mejor opción. El quiste ovárico puede crecer tanto que puede dificultar la capacidad de una mujer para concebir un hijo.