La grasa es un macronutriente importante en la dieta, pero la mayoría de las personas la asocian con cosas grasosas que se encuentran adheridas a la carne animal. Lo cierto es que muchos tipos de grasas son beneficiosas para el organismo, y podemos sintetizar la mayoría de ellas. Hay varios tipos importantes de grasas, incluidas las grasas saturadas, trans y monoinsaturadas. La buena noticia es que la mayoría de nosotros podemos sintetizar todas estas moléculas en nuestro cuerpo.
El primer paso para comprender las grasas es comprender su estructura. Hay tres categorías principales de grasas: saturadas, monoinsaturadas y poliinsaturadas. El tipo de insaturación se relaciona con la ruta metabólica de la grasa, que es responsable de diferentes efectos en la salud. La grasa saturada se encuentra en los productos de origen animal y es un problema de salud importante. La grasa saturada se usa para pruebas de diagnóstico médico y se considera que no es saludable.
Las grasas no saturadas son el tipo de grasa más común. Estos tipos siempre son producidos por enzimas y siempre muestran la conformación cis. Esto significa que la maquinaria metabólica del cuerpo descompone más fácilmente estas grasas. Sin embargo, si desea crear una nueva grasa, puede utilizar un método artificial. Estas grasas creadas artificialmente tienen una mezcla racémica de enlaces trans y cis y no tienen ningún valor nutricional. Además, no se descomponen fácilmente en el cuerpo, por lo que tienen poco valor nutricional.
A pesar de estos hechos, todavía hay mucha confusión sobre el papel de la grasa en el cuerpo. Aunque puede jugar un papel vital en el desarrollo de su hijo, hay alimentos que debe evitar. El objetivo de cualquier dieta que contenga grasas es limitar la cantidad y el tipo de grasas que consume su hijo y aumentar los beneficios de esos alimentos. Al comprender el papel de la grasa en el cuerpo, puede tomar decisiones informadas sobre qué alimentos incluir y cuáles limitar, para que la salud de su hijo nunca se vea comprometida.
Los ácidos grasos en la dieta están hechos tanto de plantas como de animales. Las frutas, nueces, semillas y huevos contienen grasas vegetales, mientras que la carne, el pescado y los productos lácteos contienen grasas animales. Además, la leche contiene muchos productos de grasa animal populares, como la mantequilla y el queso. Además, las grasas dietéticas están presentes en casi todas las partes de nuestra dieta diaria. En resumen, no hay un alimento que sea malo para nosotros.
A pesar de que no hay un alimento específico que sea alto en grasas, los ácidos grasos en los alimentos que come todos los días afectan su salud. Además, son esenciales para el desarrollo de la vida humana. Por lo tanto, debemos comer estas grasas con moderación y evitarlas a toda costa. Son vitales para su cuerpo, y son esenciales para su salud. También es importante señalar que son esenciales para el desarrollo del sistema inmunológico.
Las grasas naturales generalmente son sólidas a temperatura ambiente y provienen de fuentes animales. Por otro lado, las grasas insaturadas provienen de fuentes vegetales y son bajas en grasas saturadas. La avena, por ejemplo, contiene alrededor del 9% del peso total de su contenido y contiene dos tipos principales de grasas: monoinsaturadas y poliinsaturadas. Estas son grasas no saturadas y contienen uno o más átomos de hidrógeno. Estos son los que debes comer, ya que suelen ser más saludables que los saturados.
Además de ser buenos para el cuerpo, los ácidos grasos también pueden tener efectos nocivos. Si bien son beneficiosos para el corazón, aumentan el riesgo de enfermedad coronaria y reducen el colesterol HDL. También están relacionados con varios tipos de cáncer. Algunas personas son más susceptibles a estas grasas que otras, y pueden tener efectos negativos para la salud si las consumen en exceso. Además de ser malas para ti, las grasas trans son un aditivo común en los alimentos procesados, por lo que no son saludables para el cuerpo.
Los ácidos grasos más comunes se encuentran en nueces, semillas y pescado. Proporcionan energía y sirven como bloques de construcción para las membranas celulares y son precursores de moléculas de señalización. Algunos tipos de grasa tienen beneficios para la salud, mientras que otros son perjudiciales. Por ejemplo, la avena contiene casi un 9% de grasa y es baja en calorías. Pero la avena no es la mejor opción para el uso a largo plazo. Si le preocupa consumir demasiada grasa, elija grasas no saturadas en lugar de grasas trans.